Monologo de una margarita


Soy una margarita, salida de una semilla depositada por una bella mariposa que revoloteaba desde un lugar remoto hasta aquí. Soy tan silvestre como la que mas de entre todas mi hermanas que son amarillas como yo. Por eso nunca deje que me arrancaran de mis raices y nunca deje que me pisara niunguna circunstancia. Me distraigo con la fuente que me da la vida y me deleito con su susurro, por las noches me hace sonrreir a la luna por su cautivadora luminosidad.


¿Soy lo que esperas o lo que esperabas? ¿te confunde mis circunstancias o te confundo yo?


Un día un tulipan hermoso se me acerco y observó mi pequeños movimientos, tan delicada, tan suave y tan pequeña, son ardientes y orgullosos, en su hermoso jarrón de color azul, no quise unirme a su casa plagada de moscas, que me dan tanto miedo. En ese momento valore la libertad de verme en la majestuosidad del verde campo, plagado por la noche de estrellas y por el rocio. Al rocio debo la vida de verme respirando el aire de las colinas y de los valles cargados de naturaleza. El esta lleno de razón y de lógica, me dije que nunca me apartararia de el, mi fiel amigo cuanta razón no le sobra.


¿Soy esa princesa a la que mirabas detrás de tus gafas que desde lejos admirabas y te decias para ti, ella será mía? porque a las princesas hay que mirarlas de lejos cuando se tienen el hechizo desaparece y sin gafas descubres a la margarita silvestre.


Que sufre por no ser esa blanca rosa, plantada por unas manos en un jardín adornado por estatuas y demás duendes que recorren sus noches locas, cuídadas por aquellas mangeras, tan inmorales. Y así ellas dejaron de ser autenticas, por inmorales perfectas sin el rocio de las mañanas, sin el calor de la luna ambulante, sus adornos que cautivaban a cualquiera.
A mi me cautivaron pero ahora lloro de verlas en aquel jarrón y no pertenecer al mundo real.


¿De verdad soy esa princesa en la que sueñas?


No quiero fastidiar a las noches con mis sueños a ellos me debo hacerlos realidad, mi imaginación me permite estar viva. Permanezco quieta en esta estampa en ella aparezco entre otras muchas flores, solo soy una mas. Es alto precio ser autentica y aun no arrancada por el bello tulipán, aparto mis raices y los arrojo fuera de su cuenco infernal. Soy de la tierra, soy la bella estampa que aparece inmutable en una postal.


¿Soy bella en realidad?

Cada ocasion tiene su música incluyendo el silencio

Hay un reloj rojo oscuro y solitario
colgado en mi habitación, miro sus manillas que manipulan las horas del día
en esta hora que ya no es mía,
ya son del día anterior.......

Siento el corazón (en este silencio) como si me clavaran espinas , que no alivia esta primavera tampoco las nuevas amigas, veo pasar las horas, el olor del incienso encendido quemando el tiempo, su humo, el viento que suspira por mi ventana y mueve la llama de la consumida vela indicando que sí tal vez que no por culpa de una indecisión. Una decisión para tomar en esta hora tranquila, hacerla mia para pensar mejor, con la tranquilidad de la noche que aparece celestina engañando a la luz del día anterior.

Duermen las horas del día en una hora que ya dejó de ser mía,
sola en mi habitación apagando el televisor
demás murmullos en mi interior,
escuchando la música del silencio.

Hasta que el sol penetre e ilumine en pequeñas dosis difuminando de color el día de la noche oscura. ¿Por qué no tomar una decisión? se hace dificil cuando hay ruido exterior pero ahora no susurra nadie ni nada el ruido lo alimento yo.

Tengo el corazón metido en ese puño de llanto
que aguanto buscando un consuelo
que son sus brazos o que son su corazón

Pienso; Con un brillo en mis ojos que no ocultan nada, pinto de rosa mis labios como fresas para besar sus labios, sabor a fresa en su boca, no olvidaras esa noche como otras tantas, y tantas como quisiera mi imaginación: pensamientos hambrientos en mis ojos.

Habia una niebla de maldad a nuestro alrededor
que tapó de oscuridad su brillante luz

Recuerda los veranos, recuerda los otoños y todas las estaciones, me vienen recuerdos que alimentan la visualización: de aquellos días que me entregué sin temor, tengo el miedo del que me intento recuperar.

Pasiones durante meses dormidas
quise taparlas bajo mis sabanas,
olorosas y limpias olvidando el olor a sudor

¿como pequeños destellos mi corazón resucitará?


No olvido los amaneceres ni olvido el destino incierto.

Negar lo evidente

Negar que no se ve, cuando se siente lo evidente de mi calida palabra sobre el teclado del ordenador, atropellando los acentos y las comas porque en este momento eso me da igual.
la evidencia de unos discos encima de una mesa, de un autor que me acaricio el alma por su música en otros oidos, paso página para mantener mis valores en alto y no seguir sufriendo mas.
Mal entendidos, necesidades afectivas al borde del desastre total, amor por cariño, amistad nada mas ¿Amor de verdad?